A Diego le dolía la mandíbula. Acudió a una clínica dental tras varios meses de padecimiento. El odontólogo lo revisó y detectó un desgaste severo con pérdida de la dimensión vertical, sensibilidad dentaria y un evidente oscurecimiento del tono dental tras la pérdida del esmalte.
¿Su diagnóstico? Bruxismo severo. Diego ni siquiera sabía de qué se trataba su malestar ni por qué sucedía. Los especialistas analizaron las causas, estudiaron el caso…y decidieron un tratamiento efectivo: confección de coronas de circonio. Consiguieron devolverle su sonrisa así como una adecuada funcionalidad de sus dientes, ya que eliminaron la sensibilidad. Sus dientes lograron un tono más blanco y uniforme.
Diego estaba feliz hasta que le pasaron su factura. Él era un joven profesional altamente ocupado y estresado y, lamentablemente, sin ningún
seguro dental
que cubriera este tipo de enfermedades silenciosas, causadas entre otras cosas por el estrés.Como Diego hay muchos más: personas que no solamente no cuentan con una
póliza dental
, sino que su quehacer profesional les provoca episodios de estrés y que, sin darse cuenta, dañan su dentadura.¿Por qué? Lamentablemente el
bruxismo
comienza con un hábito involuntario, en el que se aprietan los dientes y se contraen los músculos, la mayoría de las veces durante el sueño. El problema es justamente que no sabemos cómo se mueve nuestro cuerpo cuando está dormido, entonces, es usual que ese malestar se genere inicialmente en las noches, aunque también sucede durante el día.
Las personas que padecen bruxismo aprietan fuertemente los dientes superiores con los inferiores y también pueden moverlos de atrás hacia delante y viceversa. En la mayoría de casos, este movimiento inconsciente desgasta las piezas dentales.
Existen algunas creencias sobre las posibles causas de este mal, pero se desconoce a ciencia cierta el origen real. Hay muchos expertos que coinciden con la idea de que el estrés y los trastornos del sueño podrían ser dos de las principales causas de esta dolencia, aunque también contemplan otros factores que pueden intervenir en la aparición del bruxismo como son: la mala alimentación, la alineación inadecuada de los dientes, la presencia de trastornos respiratorios durante el sueño, las malas posturas a la hora de dormir o la ansiedad, entre otras.
En todo caso, para confirmar este padecimiento, te detallamos 10 síntomas de los que debes estar pendiente.
Rechinar o apretar los dientes
Este movimiento se da acompañado de un sonido ligero pero continuo que provoca el despertar de la persona que duerme a tu lado.
Dientes aplanados. También se pueden fracturar, partir o aflojar.
Esmalte dental desgastado. Este síntoma es muy notorio, ya que al ocurrir se logra ver fácilmente las capas más profundas de los dientes.
Mayor dolor. O sensibilidad dental; sucede a todo momento en casos severos o mientras se ingiere algún alimento.
Cansancio en los músculos de la mandíbula. Causa una especie de rigidez o una sensación como de mandíbula trabada que no se puede abrir o cerrar por completo.
Dolores en otras partes del cuerpo. Provoca inflamación de mandíbula, cuello o rostro.
Molestias parecidas al dolor de oído. Muy similar, pero no es un problema del oído en realidad.
Malestar en la cabeza. Dolor de cabeza, que inicia en las sienes
Lastimaduras. Causadas por morder la parte interna de la mejilla.
Alteración del sueño. Algunas personas sufren de trastornos de sueño y les cuesta conciliar el sueño.
Y las consecuencias pueden ser más complejas: ansiedad, estrés, depresión, dolor de oído, sensibilidad muscular, sensibilidad a las cosas calientes, frías y dulces, trastornos alimentarios, dolor o inflamación de la mandíbula y otros casos como insomnio.
Los tratamientos deben ser inmediatos y para ello necesitamos un seguro dental que cubra procedimientos médicos de un bruxismo severo. El seguro social en Ecuador no cumple este tipo de tratamientos, y no contar con un seguro dental podría ser muy costoso y arriesgado.
Seguros del Pichincha tiene pólizas a medida que, entre otros beneficios, garantizan una cobertura de
emergencias odontológicas
, justamente, para cubrir diagnósticos y tratamientos del bruxismo
severo.Así también cuenta con
cobertura odontológica
nacional, cobertura en el caso de que el titular de la póliza fallezca, así como una profilaxis para remoción de placa bacteriana, resinas, exodoncias y endodoncias. Adicionalmente, el seguro dental sirve para realizar evaluaciones periódicas y no llegar a la severidad para tomar cartas en el asunto. Si bien un seguro de este tipo está enfocado en la prevención, la atención médica está disponible las 24 horas.Además, no debes esperar un tiempo de carencia porque lo puedes usar inmediatamente tras la afiliación, pagando mensualidades que se ajustan a tus necesidades y presupuesto. Por ejemplo, el plan Sonríete titular se puede obtener desde USD 4,60, el plan Sonríete
titular + cónyuge, desde USD 9,14 y el plan Sonríete titular + familia, desde USD 15,10. Al contratar cualquier de estas opciones, ten presente las condiciones de uso, las clínicas y los especialistas con quienes podrás recibir el mejor tratamiento.
FAQs: Si sufres de bruxismo severo, debes contar con un seguro dental
1. ¿Por qué es importante tener un seguro dental si sufro de bruxismo severo?
El bruxismo severo puede provocar desgaste dental, sensibilidad extrema, fracturas en los dientes y dolor mandibular. Los tratamientos para este problema, como coronas de circonio, férulas dentales y terapias complementarias, suelen ser costosos. Un seguro dental te brinda la cobertura para estos procedimientos, reduciendo los gastos médicos.
2. ¿Qué síntomas indican que puedo tener bruxismo?
Algunos de los síntomas más comunes incluyen:
- Rechinar o apretar los dientes, especialmente mientras duermes.
- Dientes desgastados, fracturados o aplanados.
- Sensibilidad dental o dolor constante en los dientes y la mandíbula.
- Dolores de cabeza, especialmente en las sienes.
- Rigidez en la mandíbula y molestias similares a un dolor de oído.
3. ¿El seguro dental cubre otros tratamientos aparte del bruxismo?
Sí, además del tratamiento del bruxismo, un seguro dental puede incluir:
- Profilaxis para remover placa bacteriana.
- Resinas para restauraciones.
- Exodoncias y endodoncias.
- Tratamientos de ortodoncia en algunos planes específicos.
